El Castillo de Fuensaldaña acogió el pasado 20 de febrero el V Congreso Internacional del Vino Rosado. La Denominación de Origen tuvo una presencia muy destacada en un evento realizado en uno de los municipios pertenecientes a nuestro marchamo de calidad.
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El encuentro reunió a veintiséis ponentes y más de cien asistentes que pudieron disfrutar de conferencias, mesas redondas y catas con el vino rosado como protagonista. La jornada concluyó con la firma del Gran Manifiesto del Rosado, que recogía las conclusiones del congreso, por parte de todos los asistentes.
La mesa de bienvenida la inauguró el presidente de la Diputación Provincial de Valladolid apuntando que “con esta quinta edición del Congreso Internacional del Rosado, Fuensaldaña, Valladolid, es capital mundial del rosado”. “El rosado está íntimamente ligado a aspectos tan importantes para Valladolid como son el empleo, el turismo o la gastronomía y la puesta en valor de los productos de nuestra tierra. En definitiva, cobra gran importancia dentro de la economía de nuestra provincia”, recalcó.
En este primer coloquio, acompañaron al presidente de la Diputación, Pablo Sáez (presidente de la D.O. Cigales), Víctor Manuel Sáez (alcalde de Fuensaldaña), Pablo Martín (presidente de la Asociación de Sumilleres) e Inés Salas (presidenta de la Ruta del Vino Cigales). Pablo Sáez destacó que “el rosado es el buque insignia de la DO, un vino que recibe numerosos premios en concursos internacionales y que pone a Cigales como la zona vitivinícola de rosados de calidad”.
El periodista José Ribagorda fue el encargado de conducir el congreso. “Hoy cruzamos nuestras fronteras y no solo hablaremos de los rosados en España, también tendremos la gran oportunidad de conocer la situación actual de este rosado en países como Francia e Italia”, señaló.
Tras la inauguración, la jornada comenzó con la ponencia del periodista Javier Pérez Andrés, que llevo a cabo una Cronología del Rosado en Castilla y León señalando la importancia de este vino en la Comunidad a lo largo de la historia. “El rosado está presente en todas las zonas de vinos de la región, con mayor protagonismo en la Denominación de Origen León y la DO Cigales”.
José Ramón Lissarrague, responsable del Grupo de Investigación en Viticultura de la Universidad Politécnica de Madrid, abordó los efectos del cambio climático en la viña y aseguró que “los aumentos de la temperatura y el déficit hídrico, provocados por el cambio climático, van a afectar a la tipología del rosado, pero estamos a tiempo de revertirlo”.
Los rosados de Italia estuvieron representados en este certamen por el ingeniero agrónomo Piermario Ticozzelli, que compartió con los asistentes un recorrido por la historia y las elaboraciones de rosado italianas, “un recorrido de norte a sur de todas las zonas que elaboran rosado”.
“Los rosados se elaboran en todos los viñedos en los que hay uva tinta en Francia”, señaló Jérôme Marty, ingeniero en Agricultura que trasladó la situación actual de los rosados en Francia.
Dentro de las jornadas de mañana, el momento del rosado en España se abordó en una mesa redonda moderada por el periodista Eduardo Gordaliza y en la que participaron Belén Sanz, directora técnica de Dehesa de los Canónigos; Ángel Anocibar, director técnico de Abadía Retuerta; Piermario Ticozzelli, ingeniero agrónomo y de producción de alimentos de la Università degli Studi di Milano; Jérôme Marty, ingénieur en Agriculture Ecole Superieur d Agriculturè de Toulouse, y José Carlos Álvarez, doctor ingeniero agrónomo – especialista superior en Viticultura y Enología. Una de las conclusiones más destacadas al respecto fue la necesidad de poner en valor el rosado como un vino accesible y fácil de beber para todos los consumidores y en todas las ocasiones.
Por su parte, Juan Pedro Peula habló de la importancia de los gustos del consumidor, asegurando que “el rosado es el vino más vistoso de todos, debería llamar la atención del consumidor y ser fácil de vender”.
La jornada de la tarde empezó con un debate centrado en la gastronomía, De tapas y rosados, en el que se puso en valor el rosado como vino que marida a la perfección con la diversidad de tapas y la cocina de España y en la que participaron Teo Rodríguez, del restaurante Trasto; Javier Peña, del restaurante Sibaritas Klub; Miguel Ángel de la Cruz, del restaurante La Botica de Matapozuelos; Sara Ferreres, del restaurante Taller Arzuaga; Luis Lera, del restaurante Lera, y Chuchi Valdivieso de Las Barricas & Clandestino. La mesa fue moderada por la periodista Loles Silva.
Tras la gastronomía, el enoturismo se convirtió en protagonista en la mesa Vivencias con rosado, que moderó el gerente de la DO Cigales, Raúl Escudero, y en la que participaron Chelo Miñana, directora de Enoturismo de Bodegas Masaveu; Beatriz Hernando, presidenta de la Asociación Española de Museos del Vino; José Manuel Ferreira, enólogo de Prada A Tope; Henar Puente, de Paradores de España, e Inés Salas, presidenta de la Ruta del Vino de Cigales. Todos ellos coincidieron al señalar que el rosado y todo lo que lo rodea “se ha convertido en un atractivo para el viajero, aunque es importante potenciarlo y divulgarlo para llamar a aún más turistas”.
Por último, los asistentes tuvieron la oportunidad de probar una cuidada selección de vinos rosados de Italia, Francia y España en una cata dirigida por Jérôme Marty, Piermario Ticozzelli y el sumiller José Antonio Cabañas.
Durante el congreso estuvieron presentes los vinos de Bodegas Sinforiano, Bodega Cooperativa de Cigales, El Lagar del Duque, Eme Bodegas, Concejo Bodegas, Mucy e Hijos de Félix Salas. Una representación de bodegas de la Denominación de Origen Cigales que, además, dieron a probar sus elaboraciones a los asistentes.
Gran Manifiesto del Rosado
Al finalizar el congreso José Ribagorda dió lectura del Gran Manifiesto del Rosado, que recogía las conclusiones del encuentro y las claves de trabajo para el futuro:
- Es fundamental hacer hincapié en la identidad de los rosados españoles
- Poner en valor el peso de la viticultura para la obtención de rosados de calidad, trabajando siempre teniendo en cuenta en cuenta la deriva y las consecuencias del cambio climático en el viñedo.
- Necesidad de hacer un estudio de mercado sobre el consumo y la presencia de esta tipología de vinos en las distintas regiones españolas.
- Hemos de tener en cuenta el marketing italiano respecto al rosado como referencia de posicionamiento de nuestros rosados en el mundo.
- Respeto a la tradición francesa como identidad de sus variedades y estilos de vino.
- Análisis de la psicología del consumidor e importancia de dar a conocer el rosado para que los centros de venta divulguen en mayor medida su consumo.
- Potenciar las variedades autóctonas españolas en la elaboración de vinos rosados mono y multivarietales.
- Valorar el rosado como un vino gastronómico que armoniza con la gastronomía de España.
- Apostar por el consumo de rosado asociado a nuestros paisajes, nuestra cultura y nuestras gentes.
- Constituir Valladolid como la capital internacional del rosado.
- Continuar trabajando en la divulgación del potencial del vino rosado, cuna de nuestra identidad histórica y gastronómica.